martes, 19 de junio de 2012

Incierto

Quizá con solo un pensamiento recuerdes pronunciar mi nombre
Quizá me piensas mientras te pienso
Si me desnudo en tu memoria ¿Serás capaz de reconocer mis latidos?
¿Serás capaz de reconocer a quien escribo?
Sin dejar caer ninguna sutileza, ni siquiera que una sombra roce la conciencia
Sin poder nada mas que un pequeño tramo de espejo
Que no alcanza
Que no logra
Que transita trémulamente el olvido
Que divisa a lo lejos una respuesta
Sobre tus labios se acuesta la incertidumbre
Sobre mis manos se anudan todos los temblores
¿Serás capaz de que un violento amor te desaloje?

lunes, 18 de junio de 2012

Después de tanta tinta

Desalojada
Inhóspita
Inaudita
Así es la idea que tengo de cabecera
Así el temblor que la suscita
Después de tanta tinta
Y de tanto tiempo inútil
De corazones a la deriva
Y llantos a borbotones
Como bodegas atestadas de vinos añejos
Y de atentados conductuales que no despiertan sonrisas ni suscitan mayor respeto
Después de una brisa violenta y una tormenta desprestigiada por la fragilidad de su lluvia
Me llevo el seso al dormitorio
Y el alma a una valija
Inhóspita la idea que me atraviesa el pensamiento
Rompe huesos e intimida
Pero de tanta tinta las manos repletas del asombro ya no abre los ojos

El ángel de un ombligo

Soy el ángel de un ombligo
Los ojos revueltos
Sin menos instantes que el aire que entra en los zapatos con los pies bien puestos
Sin menos líneas y atmósfera que la de un pez luna queriendo nadar en el inmenso vacío de una noche desclavada
Centro de papel de un llanto que se quema
Soy el ángel de un ombligo negro y profundo
Como el silencio que deja una frágil retirada.

La ley del talión

Con un llanto que no alcanza para parir todas las notas
Me extingo
Entre una realidad dibujada sobre la espalda
Y un sueño que no deja de ser sueño por quitarse el sombrero delirantemente ante un canto acordelado
De un ojo por ojo
Y un miente por miente

Lengua de olvido

Pareciera que otra lengua ocupara mi boca
Que se ha llenado de sonido cansado de rusa
Pero mis labios deshojan los días para llevarlos al encierro
Y cuanto mas pronuncio mis voces
Mas reclaman los abismos de mi memoria
En mi noche transeúnte
Una estupidez de entre ceja y ceja
Me llama al olvido

En fin...

¿Te has preguntado qué pienso si te olvido? O ¿a qué velocidad caminan mis venas mientras duermo y te respiro?¿Te preguntas por mi silencio cuando te descubres colgando de un amanecer te quedas solo? ¿O si sonrío mientras me lanzo al vacío en una improvisada acrobacia que solo en la caída cobra sentido? ¿Si se me enredan las manos por desconocer los abrazos? ¿Si he logrado desvestir la noche? ¿Si mis labios revientan como crisálidas anhelantes de luz? ¿Por las miles de palabras que nunca serán dichas?